La significatividad de los medios masivos de comunicación impacta más que los contenidos impartidos en la Escuela. La televisión es accesible sin necesidad de alfabetización.
Los medios de comunicación construyen una visión parcializada y fragmentada de la realidad, que la escuela debe enseñar a observarla desde una perspectiva crítica, organizando la información en un contexto.
La escuela debe recuperar el conocimiento, sus orígenes, debe activar los esquemas de pensamiento.
La reforma de la Educación debe ser la reforma del pensamiento. Inevitablemente esta reforma debe incluir a todos los actores de la escuela, implementando una capacitación docente centrada en las matrices internas de aprendizaje de los mismos.
La subjetividad de la modernidad estuvo a cargo de las instituciones disciplinarias del Estado – Nación (familia, escuela, cárcel, hospital, seguridad, fábrica, etc.), que funcionaron como articuladores simbólicos.
La subjetividad del Mundo Contemporáneo está en manos del mercado. La subjetividad dominante no es institucional sino mediática. En ese sentido, las operaciones básicas, no son disciplinarias sino otras. No se trata de normativa y saber sino de imagen y oposición personal.
El mercado es esa dinámica que conecta y desconecta, inevitablemente lugares, mercancías, información, personas, capitales o tecnología, sin que esa conexión – desconexión, asegure, a priori, un sentido. Esto nos somete a una crisis sin lógica articuladora y totalizadora.
En conclusión, pasamos de una totalidad articulada a un devenir no reglado, que no es “impasse” ni coyuntura, sino, un modo de funcionamiento efectivo. En este sentido la crisis ha llegado para quedarse y...
“Cuanto más progresa la crisis más progresa la incapacidad para pensar la crisis, cuanto mas globales se vuelven los problemas, menos se piensa en ellos. Una inteligencia incapaz de encarar el contexto y el complejo global se vuelve ciega inconsciente e irresponsable”. (Morín, Edgard. “La cabeza bien puesta”)
( En Módulo de ed. a distancia, Cavalli, Stella, 2009)